lunes, 27 de julio de 2009

Rubén Aeid en el recuerdo

Rubén Aeid regula válvulas en el Chevrolet de Pairetti (Foto: El Gráfico, 1966)

Como una singular sinrazón de la vida, Rubén Aeid, quien había corrido en Turismo Carretera como acompañante de Oscar Cabalén, Armando J. Ríos y Carlos Pairetti -tremendos velocistas- murió en una esquina de Arrecifes a causa de un accidente de tránsito. Junto con Osvaldo D’ Angelo y Oscar Corvino retornaban el domingo 27 de julio de 1969 en un Fiat 600 desde la ciudad de Salto, donde habían probado el Torino de Turismo Carretera de Ernesto Pierángelo, cuando se produjo la colisión que tuvo fatídicas consecuencias para Aeid. Rubén había nacido el 6 de octubre de 1930.

Pasión por los “fierros”
Quien fue uno de los notables preparadores de automóviles de carrera, precozmente había demostrado su entusiasmo por la mecánica. Mientras cursaba sus estudios primarios construía automóviles de carrera, nacidos de viejas latas de aceite y cajones de manzanas. Luego de la primaria, Rubén Aeid se inscribió para seguir “Teneduría de Libros”. Pero, enfrente de su casa, Bernardo Pérez tenía su taller mecánico en el que atendía el automóvil de Fuerza Limitada que corría Froilán González. Como era de suponer, los ejercicios de la partida doble pasaron al archivo, para ser reemplazados por cruces de árboles de levas y desmultiplicaciones de diferencial. En 1946, Aeid ingresó en la concesionaria Chevrolet de Arrecifes para trabajar en el sector de repuestos, pero nuevamente se cruzó en su destino un automóvil de carrera. Allí, Bernardo Pérez armaba el auto de Froilán González. Por lo tanto, una vez finalizadas sus tareas en la sección repuestos Aeid se acercaba al lugar donde Pérez trabajaba y poco tiempo después pedía su pase definitivo al taller mecánico.

Bernardo Pérez, su mentor

“Estaba limpiando un filtro de aire de Chevrolet (estaba dividido en tres piezas) y no encontraba su ubicación. Levanté la vista y lo vi a Bernardo Pérez que me observaba y se reía. Se acercó y me ayudó a terminar el trabajo. A pesar del ‘calor’ que pasé, cada vez que tenía un problema lo consultaba a él”
, recordaba Aeid, que pronto recibió el reconocimiento de su “profesor”.
Cuando en 1948 Froilán González corrió el Gran Premio a Caracas, Rubén Aeid colaboró con Bernardo Pérez en la preparación del auto. Más tarde, cuando Froilán viajó a Europa, Aeid estuvo desvinculado de los autos de carrera, ya que Bernardo también se había ido con el equipo argentino. Sin embargo, durante las temporadas internacionales de 1952 y 53, Rubén integró el equipo de mecánicos del Automóvil Club Argentino. Después, instaló su propio taller y se alejó de los autos de carrera. En 1956, Domingo Vita le encargó a Rubén Aeid la preparación del motor Chevrolet V8 de Mecánica Nacional Fuerza Libre. El piloto arrecifeño, con la preparación de su coterráneo, ganó en Marcos Juárez y San Nicolás, pero se accidentó en el circuito de Las Flores (1960) y allí terminó su participación con los monopostos. Ese mismo año, una semana antes del Gran Premio de Turismo Carretera, Rubén viajó a Buenos Aires para ayudarle a Bernardo Pérez en el armado del Chevrolet de Oscar Cabalén y acompañarlo en la carrera. En 1961, Aeid cerró su taller en Arrecifes y se dedicó a la actividad agrícola. Un año más tarde, nuevamente lo llama Bernardo Pérez. Esta vez, para que acompañara a Armando J. Ríos. Con el piloto de Necochea ganaron cuatro carreras y resultaron ilesos luego de protagonizar un espectacular vuelco en Rojas.

El turno de Pairetti
En 1963, Aeid ya no era acompañante de Ríos y había instalado un taller de afinación de motores en Arrecifes. Hasta allí llegó Carlos Pairetti para pedirle que le armara su Chevrolet de Turismo Carretera. La alianza Pairetti-Aeid comienza a partir de la V Vuelta de Arrecifes y el 18 de agosto “Il Matto” consigue su primer triunfo en Mar del Plata, carrera reservada para no ganadores. Poco después, gana en Tres Arroyos, pero esta vez entre “ganadores” y la culminación de un año que no había empezado muy bien, finalizó a toda orquesta triunfando en el Gran Premio, donde Rubén Aeid no sólo fue el preparador, sino que desde la butaca derecha puso la cuota de mesura necesaria para que Pairetti serenara sus ímpetus de velocista nato. En 1964 Pairetti finaliza en 17 (71%) de 24 competencias, con seis segundos puestos y dos victorias (S. A. Areco y las 500 Millas Mercedinas). En el ’65 se despide del Chevrolet ex Néstor Marincovich con un triunfo en la Semana de la Velocidad, en Córdoba y adquiere el Chevrolet ex Larry. Aeid y su equipo trabajaron en su taller de Arrecifes para adaptar el auto al manejo de Il Matto. Luego de un año y siete meses sin victorias Pairetti gana en Rojas, Pergamino y el Gran Premio. Otra vez con Rubén en la butaca derecha.
En el ’67 Pairetti se accidenta en Rafaela con el auto que le prestara Miguel Bahillo y cuando se recupera vuelve con el “Barracuda” que le había adquirido a Formisano y que Aeid también adaptó al particular estilo de manejo de Il Mato: ¡¡¡siempre a fondo!!! Con este auto Pairetti logró dos triunfos más con la atención de Aeid, hasta que en 1968 ingresó en el equipo General Motors.

Triunfos de Pairetti con la preparación de Rubén Aeid
1963: 3 (Mar del Plata, Tres Arroyos y Gran Premio)
1964: 2 (San Antonio de Areco y 500 Millas Mercedinas)
1965: 1 (Villa Carlos Paz-San Francisco)
1966: 3 (Rojas, Pergamino y Gran Premio)
1967: 2 (Hughes y Olavarría).

martes, 21 de julio de 2009

Los Emliozzi en la 5ª Vuelta

La galera de los Emiliozzi pasa por el puente del Balneario Municipal de Arrecifes

1963 comenzó bajo un signo trágico con la muerte de Juan Gálvez, el 3 de marzo en Olavarría. El múltiple campeón fue un notable piloto y mecánico, que dedicó 25, de sus 47 años, al deporte motor. La fatídica curva en el “Camino de los Chilenos” tronchó una trayectoria de lujo: 59 triunfos (5 Grandes Premios) y 9 títulos argentinos (1949 al 52, 1955 al 58, y 1960) en Turismo Carretera y como le corresponde a un grande, murió marchando en punta.
Los Emiliozzi mandan
Dante y Torcuato Emiliozzi empezaron la temporada con el pie derecho. Fiel a su costumbre hilvanaron tres victorias consecutivas: Olavarría, Pergamino y Necochea, con histórico récord (al superar los 200 km/h) 203,526 km/h para el total de la carrera.
Otros ganadores
El 14 de abril, Eduardo Casá (Ford) conseguía en la Mar y Sierras su primer triunfo en el TC. Mientras que en Santa Fe, carrera con historia si las hay, triunfaban los hermanos Saigós (Ford). En mayo, Jorge Ángel Pena (Chevrolet) ganaba en los autódromos de Buenos Aires y Mendoza, respectivamente.
Pairetti, con nuevo preparador
Velocista por excelencia, Carlos Pairetti había iniciado su segunda temporada en el TC con escasa fortuna. Los abandonos se sucedían unos tras otros. Sólo había podido terminar la carrera de Necochea, donde arribó 7º. A partir de la competencia de Arrecifes sería Rubén Aeid el encargado de la preparación de su Chevrolet.
Los premios
La subcomisión de automovilismo del Club Social Argentino, que presidía Fernando Manuel Juárez, con la secretaría de Raúl O. Tessone y tesorería de Mariano Barrios, informaba que: “se distribuirán m$n 772.350 en premios.”
La carrera
La numerosa lista de inscriptos, en este caso 72, ratificaba año a año el interés que despertaba cada una de las realizaciones de la Vuelta de Arrecifes. Un atractivo más para el público significaba la presentación del nuevo automóvil de Oscar Alfredo Gálvez. El Ford del “Aguilucho”, el noveno que utilizaba desde su inicio en el Gran Premio de 1937, mostraba líneas modernas y una trompa de revolucionario diseño que pronto ganó el mote de “el tiburón”.
El domingo 2 de junio, ordenados de acuerdo con el ranking de la Comisión Deportiva Automovilística (CDA) se ponían en marcha 59, de los 72 volantes inscriptos. Lamentablemente, entre los que no iniciaban la competencia se encontraba el nº 59 del piloto local José María Pozzi, que había adquirido una cupé Ford.
Dante Emiliozzi completaba la primera vuelta en 36:18.1/5 a 185,024 km/h, nuevo récord para el circuito. Detrás marchaba Saigós, que había punteado en los primeros 70 kilómetros de carrera. Ríos, Menditeguy, Oscar Gálvez y Ciani completaban el grupo vanguardista. Carlos Pairetti ya estaba fuera de carrera. El Chevrolet nº 8 se detuvo a poco de iniciar la competencia por rotura de un pistón.
Ciani y el Dodge
En el transcurso de la segunda vuelta se producía la primera alternativa de interés en la punta de la carrera. Marcos Ciani con su veloz Dodge superaba por tiempo a los Emiliozzi y se notaba el notable avance de Norberto Palagani que se colocaba tercero. Sin embargo, al completar el segundo paso por Arrecifes, los hermanos de Olavarría recuperaban las riendas de la competencia y comenzaba a poner mayor distancia sobre sus perseguidores: Gálvez, Menditeguy, Ríos y Ciani.
Para destacar
También merecían destacarse los trabajos de Antonio Bertolotto, Norberto Palagani, Eduardo Casá, Ángel Rienzi, José Morán y Ramón Requejo. De todas formas, Emiliozzi seguía manejando con comodidad la carrera. Los cambios se sucedieron en las otras posiciones. Oscar Gálvez quedaba fuera de carrera con inconvenientes mecánicos en su flamante auto. Esta vez, los inconvenientes pudieron más que el empeño y la paciencia del veterano corredor.
“La Galera” dejó atrás, por última vez, el puente sobre el río Arrecifes. Giró a la derecha abordando la curva que lo depositaría en la recta final. El banderazo rubricó una nueva victoria para los Emiliozzi, la cuarta del año. Además, los “Gringos” iniciaban una serie de cuatro victorias consecutivas: Arrecifes, Bahía Blanca, La Pampa y Salto. Segundo terminaba Marcos Ciani (Dodge), postergando a Armando J. Ríos (Chevrolet), el ganador en 1962.

Clasificación final (559,750 km)
1. Dante Emiliozzi (Ford) 3:03:13.1/5 a 183,304 km/h.
2. Marcos Ciani (Dodge) 3:05:10.1/5
3. Armando J. Ríos (Chevrolet) 3:06:22.4/5
4. José Morán (Chevrolet) 3:13:48
5. Rubén Roux (Chevrolet) 3:13:59
6. Norberto Palagani (Ford)
7. Ramón Requejo (Chevrolet)
8. Eduardo Casá (Ford)
9. Carlos Menditeguy (Ford)
10. Remo Gamalero (Ford)
Finalizaron: 12 (20%) de los 59 pilotos que largaron. El último clasificado fue Dionisio Araquistain (Ford), a 27m16s de los Emiliozzi.

APOSTILLAS de la 5ª Vuelta
Llegador: Con la carrera de Arrecifes, Ramón Requejo sumaba seis competencias consecutivas sin abandonos en Turismo Carretera.
Kilómetro lanzado: para los hermanos Emiliozzi (Ford) 211,700 km/h. Para Marcos Ciani (Dodge) y Armando J. Ríos (Chevrolet) 205,750 km/h.
Nuevo récord: para el total de la carrera establecieron los Emiliozzi al mejorar en 7 minutos el registro de Armando J. Ríos en 1962.

martes, 14 de julio de 2009

Arrecifes vuelve por sus fueros

Arriba: Largada de la Final, abajo, a la izquierda, el ganador de la prueba Edison Hortal, derecha, autoridades que controlaron el desarrollo de la carrera. (Periódico Arrecifes, octubre de 1946)

Si bien la Segunda Guerra Mundial había finalizado en 1945, sus consecuencias en lo relativo a la carencia de elementos necesarios para la práctica del automovilismo se hicieron sentir en los meses posteriores, por lo que aún en 1946 era escasa la actividad en tal sentido. Pero serían, una vez más, un arrecifeño (Ángel Lo Valvo) y la misma ciudad de Arrecifes de los primeros en hacer los intentos para reanudar la práctica activa del automovilismo. Lo Valvo y Ángel Pascuali, con un M.G, marcaron varios récords en las “100 Horas en Automóvil” realizadas en un circuito en forma de óvalo, con piso de ripio de 2574 metros, ubicado en la localidad bonaerense de Moreno. La prueba se inició el 12 de abril de 1946 y finalizó cuatro días más tarde.
Por su parte, la Comisión de Carreras del Club Social Argentino, presidida por el doctor Luis Alberto García, programó una competencia de fuerza limitada que se disputó en Arrecifes el 27 de octubre de 1946 marcando el retorno del automovilismo a nuestra ciudad, luego de un paréntesis de 13 años. El circuito de tierra preparado para la ocasión tenía una extensión de 1.950 metros y 12 de ancho. Estaba ubicado dentro del campo denominado “El Rincón”, propiedad del doctor Alberto Lastra, en cercanías de lo que en la actualidad es el barrio La Cumbre.

La categoría y sus protagonistas
La competencia estaba reservada para coches con carrocería de carrera y debían ser modelos hasta 1932, con blocks de fábrica, motores de serie, cilindrada original no mayor de 3400 centímetros cúbicos y cuyo régimen no debía sobrepasar las 3400 revoluciones por minuto.
El cronograma preveía la realización de tres series, de 15 vueltas cada una, un repechaje a 8 vueltas para los no clasificados y una final a 40 vueltas (78 km) en la que intervendrían los cuatro primeros clasificados de cada serie y el primero y segundo del repechaje. Las series se disputarían con un mínimo de ocho participantes y un máximo de catorce.
Los inscriptos y su numeración: 1. Alfredo Pián, 2. Aurelio Arzani, 3. “Montemar”, 4. Pablo F. Trincavelli, 5. Edison Hortal, 7. Martín Salaberry, 8. Luis Milanessi, 9. Luis Caminatta, 10. Liberato Fernández, 11. Obdulio Gonella, 12. Bernardo Berdi, 13. Ricardo Iglesias, 14. Silvestre Ortensi, 18. Florindo Nardi, 19. Aniceto Ramallo, 20. “El Centinela”, 2l. Enrique Boveri, 22. Martín Larquin, 23. Ramón Mazzutti, 24. Federico Vasser, 25. Antonio Bojanich.

Alternativas de la carrera

“La primera serie la ganó el corredor de Las Rosas (Santa Fe) Alfredo Pián piloteando un Ford de hermosa carrocería y preparación mecánica, marcando el más alto promedio del sábado con 97 kilómetros y 90,200 en la serie (…)”, destacaba el cronista del periódico Arrecifes, refiriéndose a que Pián también había prevalecido en las pruebas de clasificación que se habían disputado el día sábado.
Aurelio Arzani (Buick) y “Montemar” (José Froilán González) (Chevrolet) se impusieron en las otras dos series eliminatorias. En tanto que Federico Visser (Chevrolet) ganó el repechaje.
“Después de una hora de intervalo, tiempo en el que se regó la pista y se ultimaron preparativos para la largada de la serie final, a las 15 horas y de acuerdo a los tiempos establecidos en las eliminatorias anteriores, se alistaron los coches en la largada (…)
“Montemar y Pián luchan en la vanguardia y el piloto de Las Rosas establece el récord de vuelta para las primeras cinco vuelta se competencia. Posteriormente abandonó por rotura de caja de velocidades y toma la delantera Montemar, escoltado por Hortal y Tortoni. En la 10ª vuelta se queda definitivamente Montemar con la junta de tapa de cilindros rota y pasa al frente Hortal. Le siguen Tortoni y Boveri. En la vuelta 22, se detiene Hortal en boxes y quitan el caño de escape. Ahora, el orden de marcha es: Tortoni, Boveri y Fernández. En el giro 29 Hortal supera a Fernández y a cinco vueltas de la bandera a cuadros el arrecifeño retoma el liderazgo de la carrera. Mientras que Boveri en gran esfuerzo empuja su auto para cruzar la meta.”
Una rica pintura extraída de las crónicas de los periódicos Ideas y Arrecifes, de octubre de 1946.

Clasificación de la Final (40 vueltas)
1. Edison Hortal (Plymouth, Arrecifes) 51:36.2/10 a 85,672 km/h
.

2. Elpidio Tortoni (Chevrolet, Buenos Aires) 52:01.5/10
3. Liberato Fernández (Ford A, San Nicolás) 52:02.3/10
4. Enrique Boveri (Chevrolet, Rojas) 52:56.7/10

5. Obdulio Gonella (Chevrolet, Salto) a 1 vuelta

6. Florindo Nardi (Ford T, Morón) a 1 vuelta
7. Jesús Ricardo Iglesias (Plymouth, Pergamino) a 2 vueltas
8. Luis Milanessi (Ford A, Junín) a 9 vueltas.

ACOTACIONES
“Arrecifes vuelve por sus fueros...la progresista ciudad que se levanta a la vera del camino que nos une con Rosario, en estos momentos da la nota sensacional en el ambiente deportivo automovilístico...” -anunciaba un diario de la Capital Federal.
Público: “Cerca de 13.000 personas presenciaron la carrera", informaba el diario “Ideas”.
Premios
: “Se distribuyeron $ 5.000 en premios y numerosos trofeos y medallas. Por la noche los corredores fueron agasajados con una cena servida en la entidad organizadora, tras lo cual se realizó un baile popular en el Teatro Español”.

Bandera a cuadros
: “La nota emotiva de la jornada ocurrió durante el arribo de Edisón Hortal, cuando su padre (Cástulo) le bajó la bandera a cuadros coronándolo ganador.”

Seudónimo
: “Para seguir esquivando el problema con mi familia me inscribí con el seudónimo de ‘Montemar’, nombre de uno de los caballos de carrera de ‘Lucho’ García”, recuerda José Froilán González.

Material consultado: José Froilán González Una Pasión sobre Ruedas, de Roberto Carozzo, Diario Ideas y Periódico Arrecifes.

martes, 7 de julio de 2009

Gastón Aguirre

Didier Theys, Gastón Aguirre y Mauro Baldi en Daytona 1998

Caso paradójico el de Gastón Aguirre en el automovilismo. Se desenvolvió como un piloto profesional a pesar de que nunca se lo propuso, consciente de su responsabilidad con la empresa familiar que dirige. A pesar de su predilección por los automóviles de mucha potencia, se ha destacado por su manejo prolijo y sobrio. Aunque nunca le tembló el pie a la hora de acelerar.
Introvertido, poco afecto a las grandilocuencias, Aguirre ha tenido meritorias actuaciones en categorías zonales y nacionales. Sin olvidar un par de participaciones en las 24 Horas de Daytona. Desde siempre vivió muy ligado al deporte motor. Su padre (Jorge) también supo entreverarse en carreras de motos, Limitada del 27 y un par de competencias en el TC de los ‘60. Cuando colgó el casco siguió de cerca las campañas de Carlos Pairetti y de Luis Di Palma, alternando con el automovilismo zonal como propietario de un auto que se lo cedió a varios pilotos arrecifeños. Después, le llegó el turno a Gastón y su padre siguió como dirigente de la Federación Norte de Automovilismo. Precisamente, cuando Jorge Aguirre falleció ejercía la presidencia de la federación.
Gastón debutó en TC Zonal y se consagró campeón en 1989 y 90. Los dos años en los que participó en la categoría.
“Te acordás que mi papá tenía un carácter explosivo. Veníamos viajando desde Chivilcoy y me dice ‘¡ponete las pilas que el auto lo tenés que correr vos o quemo todo!’ Estoy cansado de gastar plata y que el auto se rompa…”, sonriendo, el tricampeón del Gran Turismo Americano explica cómo surgió su oportunidad en el automovilismo.
Automovilismo nacional
El 13 de setiembre de 1992, Gastón debutó con un prolijo Ford Falcon en Supercart. Abandonó en la final luego de haber terminado 2º en la serie. En la siguiente carrera (Concordia) subió al podio con un tercer puesto y en su cuarta participación ganó una serie. En el 93 sumó tres podios y finalizó 5º en el campeonato. Continuó en la categoría hasta el 96 inclusive. En el ’97, el arrecifeño se incorporó al Gran Turismo Americano, flamante categoría que lo tendría como referente y que la revista CORSA presentaba de esta manera:
“Gran Turismo Americano tiene características que la muestran como una opción válida, con autos de alrededor de 450 HP, motores de 5.600 cm3, chasis tubulares y carrocerías de Ford Thunderbird, y Chevrolet Lumina. Autos que nacieron concebidos para correr con una mecánica robusta y confiable y con innegables aires de la ‘Nascar’, categoría norteamericana a la cual se trata de emular. Tal vez el escenario no resultó el más adecuado como para que estos autos desarrollen todo su potencial, pero cabe aclarar que esta era la primera carrera y había muchos detalles por verificar con los autos en pista.”
Al terminar el año, Gastón sumaba cinco victorias en ocho carreras y terminaba cuarto en el torneo, que tenía un particular sistema de puntuación.
“Prácticamente perdimos el campeonato por no haber corrido el 12 de setiembre en Buenos Aires. Ese día corrí en Turismo Carretera en 9 de Julio. Luis (Di Palma) me quería llevar en su helicóptero para que pudiera correr también en Buenos Aires…”, rememora Aguirre.
Luego, se tomaría revancha ganando tres campeonatos consecutivos en la categoría. En el ‘97 alternó su actividad en el GTA con algunas participaciones en Turismo Carretera. Manejó una Chevy del equipo JC Competición. Cuando retornó al TC en 2003 también corrió con una Chevy, pero del equipo de Guillermo Ortelli.
Las 24 Horas de Daytona
En dos oportunidades Gastón Aguirre participó en las 24 Horas de Daytona. La primera vez fue en 1998 en el equipo denominado Misión Argentina, representante de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC), que integraron junto con Facundo Gil Bicella, Horacio Paolucci, Gabriel Castillo y Daniel Dopazo. Los cinco pilotos se alternaron en la conducción del Oldsmobile Cutlass Nº 56 y arribaron en la 35ª (sobre 74 tripulaciones) posición de la clasificación general y 8º en la división GT1 tras completar 445 vueltas (2549,405 km). El arrecifeño retornó a la mítica carrera en 2000 con un Chevrolet Corvette del equipo de Dale Kraide, junto con Daniel Urrutia, argentino radicado en Estados Unidos, el canadiense René Villeneuve y el estadounidense Scott Watkins. Abandonaron luego de siete horas y media de carrera por rotura de motor.

Apostillas
"24 Horas de Daytona"
"Las 24 Horas de Daytona fueron para la Ferrari 333 SP conducida por Gianpiero Moretti, Mauro Baldi, Arie Luyendick y Didier Theys. En el puesto 35 en la general, y octavos en la división GT1, arriban los argentinos Gastón Aguirre, Facundo Gil Bisella, Gabriel Castillo y Horacio Paolucci (Oldsmobile Cuttlas)." (2 de febrero de 1998)

"Abandono argentino"
Gastón Aguirre y Daniel Urrutia abandonaron las 24 Horas de Daytona como consecuencia de la rotura del motor del Chevrolet Corvette número 15 del equipo de Dale Kraider.
DAYTONA, ESTADOS UNIDOS. Después de casi ocho horas de carrera, se quedaron a pie. Gastón Aguirre y Daniel Urrutia abandonaron las 24 Horas de Daytona como consecuencia de la rotura del motor del Chevrolet Corvette número 15 del equipo de Dale Kraider. Los pilotos argentinos, que se alternaron la conducción con el canadiense René Villeneuve (primo de Jacques) y el estadounidense Scott Watkins, desertaron poco después de cumplir 7 horas y media de la 38 edición de la tradicional competencia. En ese momento estaban en el 10 puesto de la clase GTO y en el 30 de la general. El austríaco Karl Wendlinger y los franceses Olivier Beretta y Dominique Dupuy, con un Dodge Viper del equipo Oreca, se quedaron con la victoria. (Diario Olé, del lunes 7 de febrero de 2000).


Gastón Aguirre en números
Fecha nacimiento: 12.01.1969
Carreras disputadas
Supercart: 53
Gran Turismo Americano: 54

Turismo Carretera: 19

Top Race: 4

Pick Up: 5
24 Horas de Daytona: 2
Podios: 44 (7 en Supercart, 33 en GTA y en 4 Pick Up)
Triunfos: 25 (21 en GTA y 4 en Pick Up)

Mejor posición en Top Race: 4º

Mejor posición en TC: 16º
Mejor posición en Daytona: 35` en la general y 8` en GT1
Automovilismo Zonal
Carreras disputadas: 31
Podios: 24

Triunfos: 13

Campeonatos

Zonales: 1989, 90 y 2008 en TC Zonal

Gran Turismo Americano 1998
1999 y 2000.